La serie es, como no, una producción estadounidense. 7 Capítulos que forman una miniserie y que le valió a su protagonista, Bryan Cranson, un premio Emmy en la pasada gala de los premios televisivos. Premio que fué toda una sorpresa, porque nadie se lo esperaba. Y es que se lo arrebató a grandes pesos pesados del género drama. Con un palmo de narices dejó a series como Mad Men o House. El premio, a mi juicio, merecidísimo.
Bryan Cranson os sonará como el padre de Malcolm en la serie del mismo nombre (M"alcolm in the middle"). Aquí cuesta reconocerlo, la verdad, y es que factura un registro radicalmente distinto al de la comedia que nos tenía acostumbrado.
Pero bueno, tanto hablar de Bryan Cranson y todavía no hemos hablado de la serie. De qué va "Breaking Bad"?
Walter White (Bryan Cranson) es un profesor de instituto en Estados Unidos. Podría ser un ejemplo del típico padre de familia de clase media. Está casado, tiene un hijo que va a su mismo instituto y espera una nueva hija, ya que su bella mujer está embarazada.
Sin embargo, Walter es un hombre con problemas: no es tan rico, necesita otro trabajo adicional lavando coches para poder afrontar el seguro médico. Al embarazo de su mujer, hay que añadir la enfermedad que padece su hijo. Walter es un genio de la química, pero su destino parece haber sido trazado. Él lo acepta resignado. Hasta que llega un dia que enferma, cae inconsciente y lo trasladan al médico. Allí le diagnostican un cáncer de pulmón inoperable. El tiempo que le queda no se sabe.
Lejos de caer en la histeria, en la depresión o en cualquier tipo de reacción humana normal, Walter se lo calla y teje un plan para poder abastecer a su familia del dinero suficiente para no tener que penar. Cómo? La solución se la da indirectamente su hermano, agente de la DEA (policía anti-droga). Los laboratorios clandestinos de metaanfetamina están siendo muy vigilados, pero si se lo montan bien, pueden hacerse ricos.
Sin que nadie sospeche de él, Walter se aliará con un antiguo alumno suyo para elaborar la química más pura y lucrativa que conoce el viejo profesor. Su producto sin igual será el más buscado por consumidores, traficantes, y por supuesto, la policía.
Todo lo que hasta ese momento no se atrevía a afrontar, todos los prejuicios, saltarán en añicos. El fin y su fin justificarán los medios.
Poco a poco veremos como va evolucionando la enfermedad de Walter, la relación que tiene con su familia, con su "socio", con sus amigos, y como poco a poco, a medida que cada vez se mete más en el mundo de las drogas, las cortinas que tapan la realidad de los que le rodean se van bajando, mostrando un fondo no tan limpio, no tan honesto. Y al contrario, los que parecían auténticos deshaucios, aprenderán de él más de lo que podría enseñar en la escuela.
Auténtica tragicomedia, puedes llegar a reirte y a llorar en un mismo capítulo. Sin caer en sensiblerias y sin caer en comedias al uso, "Breaking Bad" nos muestra un abanico de posibilidades para que el espectador elija, si puede, lo que más le gusta.
"Breaking Bad" es dura y tierna, es divertida y a la vez reflexiva, enfatiza la vida y también la muerte. Es una road-movie, es un drama, es una comedia, es un todo. Igual que la vida que se le va a Walter, igual que la vida que les deja a los demás.
Por todo esto y por lo que podeis llegar a descubrir vosotros, os la recomiendo.